Ángeles Desterrados

Título: Ángeles Desterrados
Autora: Anabel Botella
Editorial: Nowevolution
Páginas: 254

Sinopsis:

Hay amores que son inmortales, que traspasan todas las barreras del tiempo y del espacio. Keilan lo sabe. Ha esperado a María durante siglos. Ahora dispone de una semana para que ella recuerde quién es… quiénes son: Ángeles desterrados sobre los que pesa una terrible maldición.

Opinión:

Empecé este libro con muchas ganas aunque a la vez sin grandes expectativas ya que la mayoría de opiniones que he leído eran buenas pero no demasiado. Me ha gustado bastante, sobre todo me atraía por el tema de los ángeles que me encanta y por supuesto que tenga amor, que para mí ha sido lo mejor del libro, además del protagonista masculino.

Al empezar a leer la historia me pareció que iba muy rápida, siempre digo que me gustan los libros que empiezan fuerte pero en este no me daba tiempo a asimilar una cosa y ya estaba sucediendo algo nuevo. Un comienzo demasiado rápido pero que solo son dos capítulos, después la historia ya tiene un ritmo normal y empieza a enganchar cuando todo va sucediendo un poco más despacio.

El historia sobre los ángeles no me ha supuesto ninguna novedad pero ya me lo esperaba por lo que me ha gustado, aunque me ha gustado bastante que desde el principio la mala del libro vaya apareciendo y los protagonistas tengan que enfrentarse a ella en varias ocasiones. Hay algunas partes en las que la historia se centra bastante en el progreso de la relación de los protagonistas pero cuando esto empieza a alargarse de repente se pone interesante porque se tienen que enfrentar a los malos. Tiene bastante acción y bien repartida por todo el libro.

Algo que me ha gustado mucho es que desde el principio el lector sabe de qué trata la historia y no hay que ir descubriéndolo todo, aunque vemos como es la protagonista la que tiene que ir descubriendo su pasado.

Sobre los personajes tenemos a María que no es una protagonista que me disguste pero hay algunas cosas en ella que cambiaría. Es muy ingenua y para ser una chica que quiere empezar una nueva vida lejos de su pueblo y su familia ella sola le hace falta mucha más madurez.
Uno de los puntos más negativos que le he encontrado al libro es el hecho de que la protagonista en cuanto conoce al chico, Keilan, en seguida se sube con él a su furgoneta. Lo he comentado más veces en otras reseñas, no me gustan este tipo de comienzos en las relaciones, aunque ella se sienta como hechizada y segura con él a mí no termina de parecerme creíble.
Además no me gustaba que ella empieza a notar que suceden cosas raras que tienen que ver con Keilan y apenas se extraña y se lo toma como algo normal excepto algunas veces que de repente la daba por preguntar aunque en seguida se la pasaba porque confía en él.

Keilan me ha encantado desde el principio. Lo que se sabe del pasado de estos dos es bonito y sobre todo lo que me gusta de Keilan y lo hace romántico es el estado en el que se encontraba poco antes de volver a estar con María.

Aparte está la mala del libro, que me ha gustado bastante por cómo es aunque caiga mal porque no dejará a los protagonistas tranquilos.

El amor aunque no sea de lo mejor es lo que más me ha gustado del libro, me han gustado las conversaciones que tienen los protagonistas y su relación. Como dice la sinopsis en una semana María tendrá que recordar quién es por lo que no hay mucho tiempo, pero excepto por lo que comento más arriba de la confianza que ella siente por él lo demás es muy bonito y no va muy rápido.

Del final no quiero comentar nada pero ha estado bastante bien y me gusta cómo termina.