Un ángel en una Harley

Título: Un ángel en una Harley

Autora: Joan Brady

Editorial: Vergara

Páginas: 229

Sinopsis:

Cautelosa y conservadora, Molly Driscoll sigue trabajando en el mismo hospital en el que completó su formación como enfermera hace más de una década. Cuando a su ex marido, Jason, le diagnostican un cáncer, Molly le propone un trato: si él acepta someterse a una quimioterapia, ella hará un cambio radical en su propia vida.
Él acepta, y Molly abandona el trabajo, cambia su coche por una motocicleta Harley Davidson y se convierte en «enfermera itinerante». A lo largo del camino, Molly se enfrentará a difíciles pruebas, vivirá momentos extraños y tiernos con sus pacientes, topará con un posible acosador y conocerá a un compañero muy peculiar.
Ralph es, como ella, un enfermero itinerante y un fan de la moto americana por excelencia. Pero, además, asegura ser un ángel.

Opinión: 

Tenía en mente que era una novela romántica y nada que ver. Ya en las primeras páginas me di cuenta. Se centra en Molly y su cambio en la vida. Según pone en la contraportada es una novela que deja huella pero va a ser que en mí no.

Molly es enfermera y conocemos a los pacientes que tiene y lo que hace por ellos, pero a pesar de hablar de sus enfermedades o de lo que les ha pasado, temas duros, la autora no llega a presentar bien a ninguno de ellos. Simplemente llega a un hospital nuevo, cuenta lo que les pasa y a otro hospital, poco más.
Lo que sí se ve es que Molly se encuentra circunstancias de todo tipo en su trabajo y siempre acaba pensando que le va a ir mal pero al final se acostumbra. Y sobre todo se da cuenta de que cuando piensa que está mal y que no saldrá de algo lo hace y se encuentra otra situación peor, pero todas las va superando. Al final siempre es más resistente y fuerte de lo que cree.

De Molly me llamó la atención cuando conoce a Ralph y no se fía de él. ¡Bien! Alguien que no confía en un desconocido... pero hasta aquí las reacciones normales porque después ya no es así. En algunas partes me hartaba de ella cuando quería arreglar los problemas de los demás cuando antes tendría que poner en orden su vida.
Ralph ha sido un personaje que no me ha dicho nada, está ahí para hacerle ver a Molly que vale más de lo que cree y que en su vida no solo hay cosas malas.
Las conversaciones que tienen llegó un momento en el que me ponían mala porque cambiaban mucho de tema sin responder ciertas cosas. Es como que las cosas son así porque sí, no había que buscarle respuesta.

No me ha gustado porque no me ha llegado, la novela es solo Molly. Y a pesar de tratar temas duros no se profundiza en nada, se tocan de manera muy superficial.
Más que contarte una historia lo que la autora quiere es meterte un mensaje en la cabeza, y no digo que esté mal, pero no me gusta la manera en la que lo hace, porque toda la novela ha sido decirte lo mismo una y otra vez.