lunes, 29 de agosto de 2022

Los reinos en llamas

 Los reinos en llamas (Los ladrones de humo, #3)
Título: Los reinos en llamas (3/3)
Autora: Sally Green
Editorial: Océano Gran Travesía
Páginas: 492

Sinopsis:

La trilogía de fantasía medieval, escrita por la aclamada autora Sally Green reúne a cinco jóvenes, conocidos como “Los ladrones de humo” en medio de una guerra que se inflama como la pólvora. Catherine, una princesa, Ambrose, un valiente soldado convertido en traidor, Marcio, un servidor leal que busca venganza, Tash, una chica que persigue demonios para extraer su preciado humo mágico, y Edyon, el hijo bastardo de un rey y un ladrón, deberán enfrentarse a su mayor desafío: el rey Aloysius de Brigant.

Sus destinos quedaron unidos y cambiaron por los impredecibles influjos de la magia y las guerras. Cuando éstas alcancen su punto culminante en el mundo de los humanos, el reino de los demonios revelará su mayor secreto con el poder de cambiar el curso de sus vidas y la historia para siempre.
 
Opinión:
 
Llevo una mala racha con las sagas, últimamente parece que acabo con todas mal. Esta ha sido otra más. Hay que aclarar que el tercer libro no es que haya sido mucho peor que el anterior, en el que ya noté el bajón, pero se lleva mala nota porque cuando la empecé prometía mucho y no me ha dado nada de eso. Se tendría que haber quedado en bilogía, uniendo el segundo libro con este quitando todas las partes en las que no pasa nada. Ah, y la traducción desde luego no ayuda.

Ha sido una novela que ha ido a más. O debería decir de nada a algo. No pasa nada en la primera mitad. Me sobran páginas y más páginas dedicadas a repetir para qué sirve el humo y ver cómo los personajes lo tienen que demostrar, lo que ya sabemos. Y las reuniones políticas. Unos personajes están en ese punto y otros en uno en el que directamente no parece que llegan a ningún lado y yo empezaba a pensar si se iban a quedar estancados toda la novela. Pero acercándonos a la mitad empiezan con los planes y estrategias de batalla para lo que está por venir. Los personajes se dedican a hablar de lo que van a hacer y cómo atacar al enemigo. Ya vemos que al menos los personajes tienen intenciones de hacer algo por lo que esto empieza a ir a algún lado. Aunque mientras leía me temía que se quedase en que después no pasase nada y no llevasen a cabo nada de lo que planeaban, que me metiesen todo el rollo de hacer planes para nada, pero no, llegamos después al punto en el que se ponen en movimiento. Es todo como rápido, una batalla detrás de otra y a veces tardaba en darme cuenta que ya estaban luchando, pero prefiero que haya sido así a que se enrolle con las batallas, que ya lo hace cuando las planean.

Tiene sus pros pero no deja de ser una novela de batallas y conquistas. Y ya, porque los personajes no tienen nada que aportar. Es en lo que me falla, en el primer libro sí los conocimos más, pero daba la sensación de que tenían que dar más, pero lo que ha ocurrido es que se quedan en nada. Tanto presentar a los cinco protagonistas: Edyon, Marcio, Catherine, Ambrose y Tash para que al final casi la autora me cuente más lo que pasa con los soldados y los generales de la historia que me vienen a dar lo mismo. Se dedica a meter personajes que para mí son solo nombres, y en este libro sigue metiendo más, no interesan lo más mínimo, están por estar. Para decirme su posición en batalla, lo mismo me daba. En algunos casos para hacer algo y que acabes preguntándote por qué y esto se quede suelto. Los protagonistas se estancan, es cierto que aquí Catherine deja de estar rayada con el tema de la responsabilidad que tiene encima y se agradece, pero ya. Ahora el que entra en un bucle de dar vueltas a lo mismo parece Edyon. 

Las relaciones románticas para nada han sido lo que quería. Tenemos un triángulo que ha perdido libro a libro la chispa que tenía, desde luego me esperaba otra cosa. Uno de los chicos sabes que existe porque no paran de decir su nombre, ya que aparecer va a ser que lo hace en contadas ocasiones, y me parecía un personaje interesante, pero nunca se le llega a conocer, siempre pasa algo para que no esté. Y otra relación que si podía haber estado bien en este se la ha cargado, es imposible creerse a uno de los personajes y que realmente quiera al otro, parece más por capricho, y a ratos. No sé para qué hay que darle vueltas e imaginarse posibles reencuentros si cuando ocurren después a los personajes les da lo mismo.
 
En cuanto a los enemigos de los protagonistas me parece un despropósito, no puedo usar la palabra villano en algo así, me niego porque tenemos un personaje ridículo. En vez de meter a varios ya podría haber creado un enemigo en condiciones y no unos que parecen estar por estar.
 
Del final hay que decir que por una parte se cierra una trama de una manera que no llegué a pensar, pero al mismo tiempo es como muy plano. Y la verdad es que deja con una sensación de ser un tanto conveniente para los personajes porque es SPOILER curioso que cuando desaparece el mundo de los demonios ninguno haya aspirado el humo cuando lo hacían para dos por tres FIN SPOILER
 
 

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