El libro de Miya

Título: El libro de Miya (saga Vanir V)

Autora: Lena Valenti

Editorial: Vanir

Páginas: 510

Sinopsis:

(Nota: la pongo en letra pequeña, que es muy larga.)


Róta es conocida en el Valhall como "la valkyria que todo lo ve", y es una de las guerreras indomables que Freyja y Odín mandan a la Tierra para que recuperen los tótems robados de los dioses, aquellos que pueden acelerar el ranarök.
Pero el destino le ha jugado una mala pasada y ha hecho que se encontrara cara a cara con el guerrero que se había encomendado a ella: Miya, un vanirio samurái. Ella sabe que él le pertenece, y aunque se siente ofendida porque no la reconoce, está deseosa de demostrarle que las valkyrias nunca se rinden. Sin embargo, el hermano gemelo de Miya, Seiya la ha secuestrado y quiere obligarla a vincularse con él. ¿Lo conseguirá? ¿Su vanirio samurái irá en su busca? ¿La rescatará a tiempo antes de que Seiya rompa sus alas?
La batalla final se acerca, pero una mujer temeraria e irascible luchará por que nadie la doblegue. ¿Cuánto tiempo durará su furia? Miya forma parte del clan vanirio de Chicago. Es un guerrero ancestral, un samurái que vive obsesionado con la profecía que cae sobre él y su hermano. Un hombre que cree firmemente que ha perdido la oportunidad de emparejarse a su pareja de por vida. Por eso, cuando ve descender a la valkyria de pelo rojo, todos sus miedos y sus dudas se disparan. Verla lo dejó paralizado. Ser víctima de su afilada lengua lo enfureció. Probarla fue un error.
Ahora nada podrá quitarle el sabor de su sangre ni el recuerdo de su conexión y hará lo posible por rescatarla, porque debe averiguar qué es lo que le une a esa mujer descarada y malhablada con ojos de rayos y centellas. Debe salvarla de las garras de su hermano Seiya, antes de que sea demasiado tarde. Lo hará para que no se cumpla la profecía, lo hará por venganza, pero, también, lo hará para no perder ni su alma ni su corazón.
Las espadas de los dioses están en alto. Los totéms divinos deben ser recuperados. El ragnarök se afila como la hoja de una katana. Y en la travesía por rescatar y ser rescatado, un vanirio y una valkyria están a punto de descubrir que "Solo el amor puede ponerte de rodillas"

Opinión

Al fin continúo una de las sagas románticas que más me gustan y que tenía abandonada desde hace dos años. En este libro los protagonistas son Róta y Miya y la verdad es que aunque me encanta esta saga este no me ha llegado a gustar tanto como los anteriores. Ha pasado tiempo desde que los leí pero creo que esto no influye porque recordaba bien todo y no me he llegado a perder en ningún momento, creo que ha sido por el carácter de sus protagonistas.

Tenemos a una valkyria y un samurái que no se soportan y esto en sí es lo típico de las sagas románticas pero lo que me gusta es que reconocen la atracción física que han entre ellos, no se andan con muchos rodeos.
Róta tiene mucho temperamento, es vanidosa, soberbia y con lengua afilada. Como valkyria que es no se traumatiza por lo que le pasa al principio de la historia y es muy fuerte pero también muy vengativa. Miya es un vanirio que al contrario que ella es muy reservado y se guarda cosas solo para él, no confía en nadie y se guarda lo que sabe de la profecía.

La historia no ha sido tan adictiva pero he disfrutado mucho de su romance, en su relación hay mucha pasión y sexo pero en comparación con otras de la saga me ha parecido algo más fría por las personalidades de ellos aunque lo de que sean tan distintos me ha gustado. Tienen que confiar el uno en el otro y también respetarse que falta les hace. Además del romance se ve la mala relación que tiene Róta con su generala, Bryn, de la que también se ve un poco su historia aunque para conocerla bien habrá que leer el séptimo libro.
Me he encontrado con mucha acción ya que sigue del anterior con los protagonistas teniendo que recuperar los tótems robados de los dioses para evitar el fin del mundo.
Y siempre algo que para mí destaca de estos libros son sus toques de humor, esta vez sobre todo me ha encantado leer los nombres de marcas japonesas que Róta le pone al samurái.

Engancha mucho, no me parece de los mejores de la saga porque aunque me gusta el carácter fuerte de ella son personajes que no llegan a enamorar. Lo que pasa es que otros personajes anteriores dejaron el listón muy alto y es normal que en una saga de tantos libros los haya mejores y peores. Aunque el epílogo me ha matado ¡no se puede terminar un libro así! La historia sobre ellos queda cerrada pero la trama sigue.