Somos polvo de estrellas

Título: Somos polvo de estrellas

Autora: Anissa B.Damom

Editorial: Kiwi

Páginas: 303

Sinopsis:

¿Alguna vez has deseado retroceder en el tiempo? Ojalá fuese tan sencillo como cerrar los ojos con fuerza, desearlo con ganas y despertar tiempo atrás, cuando te creías seguro de todas las cosas malas, pero sabemos que el tiempo es inalterable. No podemos evitar que ocurran desgracias, ni impedir que estas nos transformen en versiones de nosotros mismos a quienes no reconocemos. Olivia, a sus dieciséis años, acaba de descubrir que el mundo es un lugar en el que no estás a salvo, que el Destino te puede arrebatar la felicidad en un instante y que querer, incluso a uno mismo, implica tomar decisiones para las que no siempre estamos preparados. Somos polvo de estrellas habla sobre la pérdida, la amistad, la familia y la lucha por los sueños apostando por la obligación de volver a sonreír como única forma de sobrevivir al dolor.

Opinión:

No sabía apenas nada de esta novela, la sinopsis no dice nada de la historia, daba a entender que era de superación o algo así. Si me fijé  en ella fue por la autora ya que su otra trilogía me encantó. Y quería pensar que también habría romance aquí porque como solo fuera de superación no sé yo si me iba a gustar. Y sí, lo ha hecho, menos por un par de cosas, pero he disfrutado mucho de esta historia. No tengo claro que las sinopsis así ayuden porque no me habría interesado si no fuera de la autora, pero si no dice más yo tampoco quiero contar demasiado.

Tiene mucha carga emocional por lo que siente la protagonista. Hay largos párrafos (tampoco tanto, y se leen rápido) en los que describe lo que siente y es algo que me ha gustado mucho. A pesar de todo lo que tiene dentro la protagonista no sentía que me cargase de sus sentimientos. Pero sí que se hacía fácil conectar con ella. Y Olivia me gustaba porque cuando hacía las cosas mal también se daba cuenta de ello y se disculpaba. Todo lo que siente, la impotencia, está muy bien descrito. Resulta real. Y el desarrollo de esta parte, su evolución, está muy bien porque lleva su tiempo. Y en historias que te hablan de superación, aunque yo más bien prefiero decir que es seguir adelante, me parece muy importante y aprecio que esto no se precipite ni tampoco llegue a cansar al lector.  Además me gusta su coherencia y que no sea la típica que se va con un desconocido como sin nada. Y no me puedo olvidar comentar las descripciones cuando Oliva está leyendo porque ahí me sentía muy identificada con ella con esas novelas que enamoran y esos finales abiertos.

El romance ha tenido algo muy bueno y ha sido la primera escena. Llevo unas cuantas novelas quejándome de eso y aquí he encontrado lo que quería. Un encuentro entre los protagonistas  que deja con ganas de más, dándole un poco de ese toque de misterio que tanto me gusta aunque después no haya nada más de eso. Además, no es algo que vaya rápido. Pero lo que no me gusta aquí quizás es que el chico no llega a enamorar, sería mejor si hubiera llegado a ese punto. Me gusta la personalidad  de Marcus y encaja bien con Olivia. Aunque me ha faltado más desarrollo en una parte sobre él.

Lo que más transmite esta novela es el dolor de la protagonista y el tema es difícil, pero no se me ha hecho dura al incluir también un romance que le ha dado algo de luz a la historia.

Te vuelves invisible para protegerte. Aprendes a vivir en la oscuridad del túnel. Y ese estado catatónico en que solo eres un espectro que no vive, ni disfruta, es mucho peor. Al fin y al cabo, somos lo que sentimos.